INSTALACIÓN DE CCTV
Un sistema CCTV o Circuito Cerrado de Televisión funciona tras la instalación de un sistema de cámaras de seguridad que permiten comprobar desde otra ubicación (en forma remota), el funcionamiento o el estado de un lugar. Ese lugar puede ser de muy distintas características (una oficina, un edificio entero, un comercio o gran superficie en incluso una instalación al aire libre).
Una instalación básica de un sistema CCTV constaría de las cámaras y un monitor o monitores desde donde se visionan las imágenes obtenidas por estas. Hoy en día el monitoreo con cámaras de vigilancia normalmente incluye algo más de sofisticación gracias a la inclusión de dispositivos informáticos relacionados con la Tecnología de la Información.
Beneficios de un Sistema CCTV
1
SEGURIDAD
Pueden conectar directamente con la policía desde el cetro de control, posibilitando así una serie de acciones que tan solo la autoridad competente puede llevar a cabo.
2
REACCIÓN RÁPIDA
Permiten una reacción rápida, incluso en tiempo real, ante una intrusión o cualquier otro hecho que comprometa la seguridad o el normal funcionamiento de una organización. No solo hablamos de hurtos, también daños en edificios o instalaciones causados por fuerza mayor
3
VIGILANCIA 24/7
Permite una vigilancia que incluye no solo interiores de construcciones, también exteriores. Se trata de un servicio en funcionamiento continuo: puede estar disponible y grabando 24 horas al día, 365 días al año.
4
ADAPTACIÓN
La instalación se adapta totalmente a las necesidades de la empresa o negocio, puesto que un equipo profesional se encarga de elaborar un diseño ad hoc que se ajuste las necesidades del lugar, de la actividad y de la decisión más estratégica en cuestión de seguridad. Todos los circuitos de CCTV no son iguales, puesto que no todos los negocios son iguales.